sábado, 3 de noviembre de 2012

De largo aliento (2 de noviembre de 2012) - Los deportes colectivos requieren procesos


Los deportes colectivos requieren procesos
Por Jhon Jaime Osorio
@jhonjaimeosorio

Hoy comenzó otro sueño mundialista para Colombia. En la madrugada, la selección nacional de fútbol sala debutó en Tailandia en el certamen orbital de la especialidad. Se trata de otra disciplina deportiva de conjunto que en nombre del país busca lograr la hazaña de figurar entre los mejores del mundo. Difícil reto, si se tiene en cuenta que la preparación se hizo toda en casa y que no hubo fogueos internacionales.

No será fácil. En deportes de conjunto, nuestro historial deportivo no muestra mayores logros. Si la memoria no me falla, los títulos del mundo en este tipo de disciplinas se resumen en uno de béisbol en los años 50, dos en microfútbol, uno en Hockey sobre patines en un mundial de la categoría B y un título sub 17 en ultimate femenino. Estos resultados demuestran que hemos ganado muy poco en disciplinas colectivas.

Siempre he pensado que el verdadero medidor del desarrollo deportivo de un país está en lo que gane en las disciplinas colectivas. Allí, por lo general los resultados siempre obedecen a procesos bien estructurados. No quiero decir con esto que los individuales no lo sean, pero sí que allí se tienen más opciones, se presentan casos fortuitos, se pueden tener logros con deportistas excepcionales o incluso se puede ganar por accidente.

Esta vez, el deportes de conjunto, el fútbol sala es una esperanza para Colombia. Ha tenido un proceso acelerado y organizado, que hoy se refleja en una Liga profesional que avanza sin contratiempos. Obviamente, soñar con un título mundial puede sonar demasiado pretencioso; pero al menos se puede aspirar a una presentación digna y meritoria.

La realidad de nuestros deportes de conjunto invita a repensar más en ellos y a replantear hacia el futuro. En las nuevas tendencias como el ultimate estamos en la élite; en fútbol hace rato que son las damas las que sacan la cara y se acercan un poco, sin tener el apoyo que merecen; en baloncesto no figuramos; en balonmano apenas comenzamos;  y en voleibol hace poco, con las damas,  volvimos a tener un meritorio e importante cupo en un mundial, que será en el 2013.

Individualmente hemos logrado un buen desarrollo. Colectivamente todavía no. Somos muy buenos en deportes de a uno, y en los de grupo no es que seamos malos, sino que nos falta estructura. Esa es la verdadera medida y ese  es el reto a futuro.